Cuando un colaborador del área de Gobernanza es presentado al proyecto Plant for the Planet, él recibe orientaciones e informaciones sobre la importancia de hacer participar a los huéspedes en la economía del uso de toallas en los hoteles para que, en contrapartida, sean plantadas mudas de árboles en las áreas de reforestación del proyecto. Un gesto que significa mucho para la transformación del medio ambiente.
En marzo, un grupo formado por 28 colaboradores de Brasil, Chile, Argentina, Colombia, Uruguay y Perú, además de 12 periodistas de la prensa brasileña, chilena, argentina y peruana, estuvieron en la región de la Sierra da Canastra, en Minas Gerais, y conocieron el vivero de mudas de la ONG Nordesta, aliada de AccorHotels en el proyecto. Ellos también plantaron árboles nativos en una región de recarga de naciente y visitaron un espacio que fue recuperado con árboles plantados hace cinco años, interactuando con productores locales beneficiados por la reforestación.
“Fue una experiencia maravillosa. Adquirimos conocimiento muy grande con relación a todo el proceso del plantío, desde la conservación de la semilla, el vivero, el desarrollo, hasta el área que estaba degradada y que pasó a ser un local con nacientes y ríos. Sentí que estaba haciendo historia al participar en un proyecto que abarca la transformación del mundo por medio de la reforestación”, afirma Maria Carmenzita Santos Freire, camarera del ibis RJ Nova América.
La región en donde tiene lugar el proyecto en la Sierra da Canastra alimenta las nacientes de tres ríos: el São Francisco, el río Grande y el río Paranaíba. El plantío de las mudas financiadas por Plant for the Planet es fundamental para la recuperación de las nacientes de esos ríos, garantizando la producción de agua y el mantenimiento de la agricultura local.
“En 10 años que hago parte del proyecto, ya vi mejorar mucho la cantidad y la calidad del agua en nuestra región”, destaca Claudio Vasques Vequieti, productor rural en el municipio de Formigas. “El plantío de los árboles mejora también la calidad del aire, pues la temperatura y el clima quedan más amenos en un lugar en donde hay bosque y árboles nativos”.
La ONG Nordesta es responsable por todas las etapas de la reforestación que ya recuperó 332 hectáreas, área equivalente a 442 campos de fútbol. Además, trabaja con la protección de 241 nacientes.
Después de aprender cómo suceden las etapas de colecta de semillas y de preparación de las mudas para plantío, y de conversar con algunos productores locales, los colaboradores colocaron las manos en la masa – o en la tierra, literalmente: hicieron el mantenimiento del plantío de árboles realizado a inicios de enero.
“Una sensación muy gratificante tener la oportunidad de estar aquí en Brasil. Volveré recargado para llevar y transmitir todas las informaciones vividas aquí para mi país”, comenta Barbara Torres, asistente administrativo del ibis Manquehue Norte, en Chile.
Hospedados en una importante región turística del estado de Minas Gerais, los colaboradores aprovecharon la oportunidad para hacer un paseo en lancha por la región de los cañones en el lago de Furnas, con paredones de más de 20 metros que guardan piscinas naturales.
